2021 Junio

La importancia del chequeo masculino

Porque sabemos lo importante que eres para tu familia, en el mes del padre, te invitamos a cuidar tu salud para que puedas seguir disfrutando de los que más quieres.

Realizarse chequeos de manera periódica permite detectar precozmente patologías o condiciones de salud que puedan generar complicaciones en el futuro como, por ejemplo, la prediabetes antes de que se convierta en diabetes, o también sirven para descubrir parámetros alterados que podrían convertirse en enfermedades sin síntomas o silenciosas, como la hipertensión, hígado graso, anemia, cáncer, entre otras. De esta forma, los exámenes preventivos resultan cruciales para establecer diagnósticos y así, tratar y/o controlar diversas patologías.

En hombres adultos menores de 40 años, se recomienda una evaluación con una ecografía testicular, la cual visibiliza tumores o quistes testiculares. Con respecto a los hombres mayores de 40 años, aparte del análisis anterior, deben realizarse el antígeno prostático específico que es un examen de sangre que sirve para descartar y/o detectar precozmente el cáncer de próstata. Asimismo, se puede complementar con una ecografía de próstata.

Por otra parte, existen evaluaciones que no son exclusivamente para hombres, ya que al igual que las mujeres pueden desarrollar enfermedades cardiovasculares, metabólicas, entre otras. Por esta razón, es clave consultar con un médico para que derive al paciente de acuerdo a su estado de salud. Dentro de los análisis más comunes, se encuentran aquellos que miden la insulina, colesterol, ácido úrico, presión arterial, exámenes que detectan problemas a la sangre, corazón, pulmones y abdomen.

De la misma manera, se aconseja a los hombres que tengan dolores de mama, realizarse una mamografía y ecografía mamaria, ya que si bien es menos frecuente que en mujeres, pueden desarrollar cáncer de mama.

A su vez, además de los chequeos y controles médicos, es importante poner en práctica los siguientes hábitos para llevar una vida más saludable:

  • Realizar actividad física de manera frecuente, por lo menos 3 veces a la semana. Considerar los resguardos y horarios permitidos en la franja deportiva.
  • Llevar una alimentación rica en frutas, verduras y proteínas (animales y vegetales), baja en grasas y azúcares.
  • Reducir el consumo de sal.
  • No fumar ni exponerse al humo del cigarro.
  • Disminuir el consumo de alcohol.
  • Dormir bien en lo posible (en promedio 7 a 8 horas de buena calidad).
  • Cuidar la salud mental.
  • Evitar el sobrepeso y la obesidad.